Visitar el Palacio del Senado puede ser una alternativa a la clásica visita turística.
El edificio del Palacio del Senado se contruyó a finales del siglo XVI con el objetivo de convertirse en el lugar de albergue para los monjes agustinos. Y esa fue su actividad hasta que en 1812 se destinó a la función que cumple aún hoy en día.
El edificio cuenta con un estilo de base herreriano, pero a partir del siglo XIX, se realizaron algunas modificaciones en fachada e interiores que tenían como protagonistas otros estilos, como el clásico en algunos elementos de la fachada o el gótico inglés introducido en la biblioteca. Pero no son los únicos cambios, también ha sufrido una ampliación.
La importancia del edificio a nivel político y arquitectónico es más que evidente, pero cuenta con otro gran atractivo para los amantes del arte; en su interior acoge una importantísima colección de arte que hace un recorrido por la segunda mitad del siglo XIX.
Sorolla, Tàpies o Joan Miró, son algunos de los autores de las obras que se encuentran en el Palacio del Senado de Madrid.
Si eres un/a amante del arte, merece la pena que lo visites.
