Sevillanas, rumbas, felicidad y desgarro, alegría y cante jondo. Todo ello acompañado de la pasión e intensidad que muestra este bonito artes, haciendo que la expresividad sea indispensable. Esto es lo que hace que cualquier persona, sea de donde sea, conozca o no el idioma, pueda experimentar el sentimiento que transmite el flamenco y se le ericen los pelos.
Suena, quizás, un poco atrevido, pero Madrid se considera la capital del flamenco. todo aquel artista que quiera triunfar en este mundo siempre debe acudir a Madrid para demostrar sus cualidades en la capital de España. La ventaja es que en Madrid puedes disfrutar del flamenco cualquier día de la semana, tanto en grandes salas, teatros, como en bares, tabernas o diferentes tablaos. De Madrid han partido todos los artistas que han demostrado su valía al mundo y que han emocionado y erizado la piel allí por donde han pasado con su arte.
Con la efervescencia de los cafés cantantes que se popularizaron en el siglo XIX el flamenco fue adquiriendo mayor protagonismo en la ciudad. Hoy en día, estos cafés se han ido convirtiendo en tablaos o bares que ofrecen espectáculos flamencos mientras sirven la cena. Todo un gusto para los sentidos.
Si tienes pensado viajar a Madrid intenta no perderte alguna de estas increíbles experiencias que os vamos recomendando.